Uso histórico del petróleo
El uso del petróleo crudo data desde tiempos prehistóricos. De acuerdo con la Biblia, Dios dijo a Noé: «Haz un arca de madera resinosa y recúbrela con brea por dentro y por fuera». El arca de Noé fue embreada por completo.
En la Biblia, lo refieren como betún o asfalto. En Génesis 11:3 mencionan el asfalto como pegamento de la Torre de Babel y en Génesis 4:10 se describe como fueron derrotados los reyes de Sodoma y Gomorra al caer en pozo de asfalto en el Valle de Siddim.
En Babilonia, en el año 1200 años a. C., se usaban lámparas de aceite mineral. Después se descubrió la mecha confeccionada en lino, médulas de junco y ciertas hojas. Los romanos llamaron lacus asfaltitus a las emanaciones cercanas al Mar Muerto. Los egipcios la denominaron mumiya, que se traduce como betún para embalsamar. Asimismo, los persas usaron el nombre mum; los indios precolombinos mexicanos, chapopoteras; y los incas, copey. Mucho tiempo después, los colonos de Estados Unidos la conocieron como seepages.
Los chinos, por siglos usaron el gas de petróleo para cocinar y alumbrar. En américa, las sociedades precolombinas utilizaban la brea, para impermeabilizar sus aparejos de pesca y sogas, además de “calafatear” sus balsas y los griegos la utilizaban con fines bélicos.