Perforación de un pozo
La perforación rotatoria es la más usada en pozos petroleros. Este método emplea tubos cilíndricos de acero (barras de perforación) acoplados a un tambor (mesa rotatoria) mediante el cual se les imprime una rápida rotación. La sarta de tubos se conecta, en su extremo inferior, a una broca (trépano) con elementos cortantes de diversos tamaños, según el tipo de roca por perforar, fabricados de acero endurecido o con incrustaciones de diamantes.
El material molido por el trépano se extrae por circulación a presión de agua mezclada con arcilla (lodo de perforación), la cual ayuda además a sostener las paredes del pozo, manteniéndolo lleno de lodo.
El empleo de coronas saca-testigos permite extraer durante la perforación una muestra del material del fondo, la cual penetra automáticamente en la barra de perforación y se recupera en la superficie para su análisis.